La humanidad avanza de vez en cuando. En el atletismo, la tecnología o la medicina, los humanos generalmente realizamos tareas mejor que hace unas generaciones.
No ocurre lo mismo con los caballos.
No busque más, el Derby de Kentucky, cuya edición número 150 se celebrará el sábado en el histórico Churchill Downs. No ha habido cambios significativos en los tiempos de los caballos ganadores desde 1960. De hecho, el ganador promedio del Derby de Kentucky en la década de 2010 fue más lento que el ganador promedio en la década de 1960, y el récord de la oficina se estableció en 1 minuto, 59,4 segundos. 1973 no se ha superado en medio siglo. Los registros de la oficina de Preakness Stakes y Belmont Stakes de 1973 aún se mantienen.
Compare esos resultados con la carrera masculina de 800 metros, un evento con aproximadamente el mismo tiempo de finalización. A partir de 2012, se estableció un nuevo récord olímpico, la segunda medalla de oro más rápida se produjo en 2016 y la tercera más rápida fue en 1996.
Los programas de cría de pura sangre y el aumento del tamaño de la población a partir de la cual se seleccionan los individuos no han dado como resultado tiempos más rápidos en el Derby de Kentucky, lo que indica que la velocidad de un caballo puede alcanzar sus límites fisiológicos. En el año En un estudio de 2008 publicado en el Journal of Experimental Biology, el profesor de biología de Stanford, Mark Denny, calculó que la velocidad máxima absoluta de carrera para el Derby de Kentucky podría ser aproximadamente un 1% más rápida que el récord actual.
Denny teoriza que la cría selectiva, que comenzó al menos 100 años antes del Derby de Kentucky, provocó que la racha ganadora cayera en los primeros años del evento. El hecho de que la mayoría de los caballos de carreras desciendan de unos pocos ancestros ha reducido en última instancia la diversidad genética, pero el proceso de reproducción puede no tener el potencial de producir caballos más rápidos. Según Dunne, los criadores de caballos ya habían elaborado los Quisats Haderach y era la Secretaría.
Además, los caballos no se han beneficiado de la mejora de sus equipos como lo han hecho los humanos. Además, si bien se sabe que los caballos corren dopados, existe la cuestión de si los tiempos más rápidos de los corredores humanos fueron producidos por estimulantes desconocidos.
Sin embargo, lo más importante es que los atletas humanos tienen un hambre de crecimiento que los impulsa a aprovechar cualquier ventaja que puedan para romper el récord de centésimas de segundo. Los caballos no son cada vez más rápidos, pero pueden ser mejores por ello.